La fotografía de bodas es cara, eso me dicen. Me pasa a menudo que hay parejas que me dicen “me encanta tu fotografía, la manera que tienes que transmitir, envíame tus tarifas” y cuando hablamos de las tarifas , no vuelvo a saber nada sobre ellos. O peor aún me dice que un familiar (cuñado con cámara) les va a hacer su boda, sin conocer la responsabilidad que ello conlleva.
Os voy a contar lo que no se sabe, la trastienda de la fotografía de bodas. Porque muchos novios piensan que la fotografía es simplemente apretar a un botón, con eso has acabado y simplemente tienes que entregarla.
Aunque se pueda pensar en que el trabajo del fotógrafo acaba el mismo día de la boda, no es del todo correcto. El trabajo comienza mucho antes de la boda:
- Antes de la boda. Reuniones con los novios, contratos, concretar preboda, hacer un planning para saber los tiempos y aconsejar sobre los horarios a llevar el día de la boda, ir a ver localizaciones y conocer el lugar donde se darán el si quiero los novios.
- El día de la boda. Este es el trabajo que todo el mundo conoce, el trabajo de campo. La media de una boda esta más cerca de las 12 horas que de las 8 horas, acompañamos a los novios desde sus preparativos hasta el baile y si la cosa esta animada no tenemos limite de horario.
Durante todo el día el fotógrafo no para de capturar, aconsejar, correr para conseguir la foto que busca, el ritmo lo marca la boda y hay que estar presente en todos y cada uno de esos momentos de ésta.
- Después de la boda. Ya ha terminado la boda, sin embargo nuestra labor continua. Es el momento de hacer copias de seguridad, realizar una selección, procesar todas las fotos una a una, maquetar el álbum, exportar los archivos finales que se van a entregar, preparar el packaging y por último entregar todo el material a la pareja.
Lo que no ves del trabajo de un fotógrafo de bodas
- En este artículo no aparece, que hemos tenido que invertir en tener una formación, no solo en fotografía de bodas, si no en retrato, en moda, en producto, naturaleza, deportes, arquitectura, etc. Conferencias, workshops, talleres, shootings, etc.
- Un puñado de horas invertidas en leer muchos, muchísimos libros, paginas webs, ver vídeos, leer artículos, quedar con mucha gente.
- Invertir en un equipo profesional de calidad, hablamos de unos cuantos miles de euros, con la tecnología más fiable, los mejores objetivos, equipos informáticos, licencias de software, tarjetas de memoria, baterías, flashes, disparadores, etc.
- Hoy día si no estas en Internet no existes por lo que hay que sumar gastos de crear una web, publicidad, un servidor para alojar la web, compra de un dominio, etc.
- Sin contar pago de autónomos, seguro responsabilidad civil, seguro material, etc.
- Y lo más importante algo que es difícil de cuantificar, y es la responsabilidad de capturar un momento irrepetible, saber que si fallas no hay otra oportunidad. Es aquí donde entra la experiencia y profesionalidad.
La fotografía de bodas no es cara, y más teniendo en cuenta que será el encargado de crear tu recuerdo. Puedo decir con total seguridad será el profesional que más horas destine a vuestra boda junto con vosotros.
El concepto caro o barato no depende del precio, si no de la calidad. Estoy seguro que no tienes el coche más barato del mercado ¿verdad?, todos los coches te llevan, pero hay una diferencia entre el coche más barato y otro más caro, esa diferencia es la calidad, fiabilidad de lo obtenido.
Si queréis a un fotógrafo de bodas low cost, que haga el reportaje por por un precio reducido, tendréis una calidad en consecuencia a ese precio. Si queréis a un fotógrafo de boda con una calidad alta, profesional, que cree un recuerdo único, tenéis que saber que el precio no puede ser el mismo.
Si le dices al cuñado con cámara que haga algunas fotos, pues tendréis suerte si al final saca algo.
Entonces ¿por qué pagar a un fotógrafo profesional el día de tu boda? Se paga para documentar un hito en vuestra vida, por atesorar vuestros sentimientos, para recordar un día de esos que tienes que recordar para siempre.
Y si le dices al cuñado con cámara que haga algunas fotos el día de tu boda, pues tendréis suerte si al final saca algo.
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